Sueles mostrarte un poco enérgico

e impetuoso, en el fondo eres una persona
nerviosa y muy susceptible.
No disfrutas de las críticas y mucho menos
de las situaciones extremas.

     Esta posición favorece la digestión pero genera

presión en articulaciones y músculos,
lo que propicia dolor, hormigueo y contracturas.

Tu postura te delata al dormir